En nuestro espacio #LaBiciMeEmpodera, Iraís Maya nos cuenta desde México cuál ha sido su experiencia con la bicicleta y nos detalla los beneficios recibidos, sobre todo en su estado de ánimo y salud.

Qué significa para ti andar en bicicleta, a diferencia de caminar o usar vehículo?
¡Muchísimas gracias por tomarme en cuenta!
La bicicleta para mí significa liberarme de ataduras, de tener la opción de sentirme libre, capaz y completamente afortunada de dar a mi cuerpo la oportunidad de superar límites y romper barreras. En bici mis tiempos de traslado son mejores, a diferencia de caminar, aunque cabe destacar que siempre seré peatona.
¿Qué representa el antes y después, en tu caso, de andar en bicicleta?
Dije adiós a la ansiedad que me genera utilizar sistemas de transporte colectivo. Durante muchos años experimenté la sensación de querer salir corriendo, de querer llorar, de sentirme avergonzada por ponerme nerviosa, sin saber que todo ese conjunto de emociones se llamaban ansiedad. Fui diagnosticada con este trastorno mental pero afortunadamente yo ya había descubierto una maravillosa manera de realizar mis traslados. Hoy, más que nunca, estoy agradecida con este hermoso vehículo de dos ruedas por todo lo que me ha dado: calidad de vida, salud (mental y física), ahorro de dinero y tiempo y, por supuesto, mucha felicidad y sonrisas en cada viaje.

¿Cuáles consideras que son los principales retos de una mujer al andar en bicicleta en la ciudad?
Romper con el lamentable mito de que nosotras no podemos. De ahí en fuera, la mesa está puesta para empoderarnos a bordo de una bicicleta.
Claro que hay otros retos que no solo los enfrentamos como usuarias de la bici: el acoso sexual. Este es un reto como sociedad pero, sin temor a equivocarme, les puedo decir que en bicicleta la percepción de seguridad es mucho más alta. El espacio vital y el área de contacto con más gente en bici está resuelto.
¿Qué tipo de empoderamiento te ha dado la bicicleta al usarla?
Seguridad, conocimiento de mis capacidades, vencer miedos, tomar el espacio público y libertar en mi toma de decisiones diarias. Me gustaría llevar hasta el último rincón del planeta el hecho de que la bici nos hace libres, seguras y empoderadas.
¿Qué recomendaciones darías a las mujeres que quieren andar en bicicleta en la ciudad y por cualquier motivo no se animan?
Acercarse a grupos de mujeres, hay muchísimos en diferentes ciudades del mundo. Comenzar poco a poco, atreverse a romper límites y buscar apoyo de la red de mujeres, que como yo, ya hemos tomado las calles. Hay muchísima información respecto a la movilidad en bici, busquemos, compartamos con más y hagamos crecer esta red de mujeres empoderadas a bordo de la bici.
Pero siempre recordar que el primer paso es vencer el miedo y una vez tomando la bici, nadie nos va a parar. ¡El mundo nos quedará chico en bici!
